Con una carta abierta de la candidata popular y alcaldesa en la que hace repaso a sus 8 años de mandato.

Isabel Villa. Foto de archivo
Tras la publicación de la lista de candidatos, los populares ponen sus cartas sobre la mesa en un repaso de lo que, desde su punto de vista, ha supuesto la gestión de Isabel Villa para Logrosán.
En un par de meses se cumplirán 8 años de la entrada del Partido Popular en el gobierno del Ayuntamiento de Logrosán. En estas dos legislaturas, Isabel Villa ha regido el gobierno de este pueblo despertando adeptos y detractores en cada una de sus decisiones, como por otra parte es habitual en política; aunque se mire como se mire, si de algo no se le puede acusar a la alcaldesa de Logrosán es de “pasividad”.
Los opositores acusan a su gobierno de endeudar las arcas municipales, de derrochar dinero sin control, de no hacer un reparto justo del empleo, de abusar demasiado del “amiguismo” en muchas de sus actuaciones… Sus defensores sin embargo alaban sus muchos proyectos, obras y servicios que han hecho cambiar cosas en Logrosán; desde las viviendas y otras ayudas sociales, el proyecto de la mina o la estación, la traída de servicios comarcales como la ITV o el SEXPE, las obras de reforma de calles y Plaza o su política de empleo.
2015 es un año de examen para todo esto, y al final será el pueblo de Logrosán el que decida lo que quiere para su futuro, pero mientras llega el día en que se decide, los candidatos intentan convencer a los votantes sobre las ventajas de entregar el voto a su formación y no a otra.
Los populares ya han abierto brecha y vienen presionando con fuerza. Han sido los primeros en hacer pública la lista de candidatos e inmediatamente después han hecho pública en LAD la carta de presentación de la candidatura que se centra en tres cuestiones: El trabajo realizado en estos años, la justificación de su decisión de presentarse a un tercer mandato y la presentación de su equipo para la continuidad de proyectos que aún les quedan por hacer, tal y como reza su eslogan de campaña.