El 16 fue más lluvioso, más frío en invierno y más moderado en verano que el año anterior.
JULIO GIL. El verano no llegó a alcanzar los 40 grados, si bien la media fue superior al 2015. Cayeron en el suelo logrosano 300 litros más de agua que el 2015 y la temperatura mínima del año (-3,2º), registrada el 17 de febrero, fue por encima de un grado menor que la mínima del 15. El día más lluvioso fue el pasado 20 de noviembre, cuando se recogió un registro de 60 litros mientras que en el mes de agosto se registraron 0 litros de lluvia, al igual que en 2015.
El día más caluroso se registró (también en el año 15) en el mes de julio cuando las temperaturas marcaron un máximo de 39,9º de máxima y 19 de mínima con una media de 30º para todo el mes.
En cuanto al gráfico de la pluviometría comparada, se observa una calara recuperación respecto a la del año anterior, aunque se sigue estando por debajo de la media de los últimos 25 años.
Llama la atención la temperatura máxima registrada en el mes de enero con 23º. Nos tenemos de ir hasta abril para encontrar un máxima más alta (25,4º). Otro signo de que el clima tiene síntomas anormales es el hecho de que la máxima de septiembre supere a la del mes de agosto. (FUENTE: IES «Roso de Luna» de Logrosán).
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